El Gobierno de Perú decretó este domingo el estado de emergencia en las regiones de Madre de Dios, Cusco, Puno, Apurímac, Arequipa, Moquegua y Tacna, debido a la crisis social y política que se vive desde el pasado 7 de diciembre en el país suramericano.
Este decreto se produce cuando en la víspera un total de 26 personas resultaron detenidas mientras otras 24 han resultado heridas tras la represión de la policial, cuyos efectivos usaron perdigones, en la protesta que se escenificó en Lima.
Las marchas para exigir la renuncia de la presidenta designada Dina Boluarte y de los miembros del Parlamento prosiguieron este sábado tras casi dos meses luego que la víspera el Parlamento archivó la más reciente propuesta del Gobierno para adelantar los comicios en 2023.
Las autoridades han hecho uso de bombas lacrimógenas para dispersar a los manifestantes lo que ha derivado en varios enfrentamientos, así como en la avenida Grau, donde varios periodistas han denunciado haber sido golpeados por la Policía.
Este domingo, a través de un decreto supremo publicado en el diario oficial El Peruano, el Ejecutivo extendió el estado de emergencia a estas zonas donde se siguen reportando las mayores protestas antigubernamentales.
La medida ya se aplicaba en Cuzco, Puno y Tacna, y en algunas provincias de Apurímac, Madre de Dios y Moquegua, pero ahora se amplía a nivel regional e se incluye Arequipa.
Asimismo, el Gobierno decretó a mediados de enero y por 30 días el estado de emergencia en Lima, Callao, Amazonas y La Libertad, por lo que en total son once departamentos los que permanecen en estado de emergencia.
El decreto establece que durante el estado de emergencia quedan restringidos o suspendidos “los derechos constitucionales relativos a la inviolabilidad de domicilio, libertad de tránsito por el territorio nacional, libertad de reunión y libertad y seguridad personales”.
La norma precisa, además, que la Policía Nacional del Perú mantiene el orden interno, con el apoyo de las Fuerzas Armadas, “con excepción del departamento de Puno, donde se requiere que el control interno sea asumido por las Fuerzas Armadas”.
También estableció la inmovilización social obligatoria desde las 20H00 a las 04H00 horas en Puno por 10 días calendario.